Quiero el desvelo de tu piel por mi sangre,
desgarrando en silencio este cuerpo que arde
el musculo altanero , la fuerza del guerrero
la vigilia en tu cuerpo prolongando el instante.
Remolinos de fuego perdiendo los sentidos ,
redoble de tambores que del pecho se escapen
Vorágine de labios conjugando mil verbos
la calma de la brisa en canto de suspiros