Mis ojos contemplan la belleza
que tiene mi tierra querida;
belleza, llena de nobleza
que cicatriza la herida.
Una herida de amor,
una herida de paz espiritual,
que lanza un grito redentor,
con fervor sentimental.
viva la mujer que me adora;
viva la mujer que se enamora,
viva la mujer trabajadora;
viva la mujer encantadora.
Mujer llena de belleza
es tu nombre perfecto,
mujer que encanta a la naturaleza
y asombra con su intelecto.
Mujer que acaricia el velo
de vislumbrante destello
que ilumina hasta el cielo,
con ráfagas de luz y terciopelo.
Admiro a la mujer por su belleza,
impregnada como aliento de vida,
de suaves matices y llenos de grandeza
de la fémina prohibida.
Alzo mi rostro al firmamento
y lanzo una mirada efímera como el viento
que construye mi alimento
disfrazado de paz y aliento.
Viva la mujer,
viva la paz y el amor;
viva la mujer
que me inspira en todo su esplendor.