Lentamente cae la noche tras el cristal de mi ventana, la luna apenas y se asoma tras la neblina densa que surca el derredor de mi alma… el silencio tan imponente somete a mi voz que se ahoga en un sollozo de mis ojos que te buscan en la inmensidad y no pueden encontrarte y lloran sin cesar, solo ven la terrible oscuridad y la niebla que cada vez me envuelve más y más.
Cual pálida luz que se extingue así me quedo yo, esperando inútilmente tu llegada en la inmensidad…miro y solo encuentro soledad, esa soledad que se queda pegada en los huesos y no quiere dejarme en paz.
Las estrellas titilan a lo lejos y me dan una pequeña luz de esperanza de que llegarás… y a lo lejos distingo una silueta tras el cristal, eres tu…si tu mi dulce amor que has llegado al fin a darme tu amor, a dejarme tu inmensa paz.
Me abrazo a ti y siento tu calor tan cerca de mí, siento tu cuerpo junto al mío que solo te quiere amar…estar a tu lado nada más…
Veo tu dulce mirar que me embelesa y me hace suspirar, y en cada suspiro me dejas tu amor que día a día crece más, tus dedos sutilmente recorren mi piel que se estremece sin parar, y tus labios en los míos me invitan de ese dulce néctar que son tus besos llenos de un exquisito amor que solo me hace soñar.
Entre tus brazos me siento segura y me haces viajar por el mar y el universo...nos fundimos en este amor que nos hace uno, que nos lleva a detener el tiempo en un segundo.
Y así nos amamos minuto a minuto, tú y yo unidos en esta intensa entrega de amor infinito, nos despojamos de todo y nos vestimos del calor de nuestros labios, de nuestros besos que se dispersan por nuestros cuerpos que arden de deseo y pasión desenfrenados.
Llega el alba, y los tenues rayos caen sobre mi cara…te busca mi mirada y solo encuentra…nada, el lecho aun esta tibio, fue un espejismo o una ilusión efímera de mi alma enamorada… te busco y solo tengo tu fragancia, tu esencia sobre mi piel desnuda que aun se estremece al recordar cada caricia de tus labios que dejaban ese sabor de miel y mar, solo queda el recuerdo de una noche de entrega apasionada, solo queda ese sabor que deja la esencia de un alma enamorada.
¿Ilusión o realidad? No lo sé, solo espero que vuelva a anochecer…que volvamos a ser cielo y mar, sol y luna…volvernos a amar nuevamente al anochecer…volver a entregarnos con la pasión y el amor que existe entre un hombre y una mujer.