Hay madrugadas tristes como las de estos días,
más… en estos tiempos de los aires navideños
porque de todo no podemos ser los dueños;
es un hecho, que éstas madrugadas, no serán las mías.
No habrá alegría cuando no pudo haber cultivo
gracias a todas las cosas negativas ya dadas
esta navidad mis sonrisas entregaré disimuladas
y, solo a lo mejor dé gracias, por estar vivo.
Pero… siendo hombre de bien en mi cabeza
no cabe maldecir por lo que ahora estoy viviendo;
solo le pido a Dios que los que no estén comiendo
tengan siempre de comer y aliviará mi tristeza…
Alviz Neleb
Diciembre 13 de 2011
5:55 a.m. - Martes