Parado allí en la ventana
viendo el cielo estrellado
vi una estrella que cruzaba
el cielo de lado a lado.
Era una estrella fugaz
que hacía su recorrido
y yo por casualidad
la observé muy complacido.
Ella pasó de pronto
y ante mí, desapareció
dejando luz en mi rostro
y dicha en mi corazón.
Alejandro J. Díaz Valero