Alardea,
alado seas,
y temido por quien quieras.
No te frustres ante nada, pelea.
Como el agua que arrebate
a su paso y como quiera,
lo que cree que necesita.
Fuerza divina, aquilea,
alado seas.
Reconstruye muros férreos,
hechos de adobe, de ideas.
Forjados de nuevos tiempos,
que se enfrían en cada sol.