Hay miles de preguntas
Millones de respuestas
Pero mis penas, son gotas
Embriagadas, en sus notas…
¿Quién me dice la verdad?
¿Quién miente, con maldad?
¿Quién sonríe, por mi vanidad?
¿Quién me quiere, en realidad?…
Escalera de eslabones, malditos
Que sus recorridos, son gritos
Vagando en todos, mis leo gocitos
Cedulas malignas, con sus granitos…
Hay un mundo, dentro de mi ser
Un país que construye mi piel
Que se regenera, desde el ayer
Divagando entre dibujos, de hiel…
¿Quién me dicta, este crucigrama?
Que me acompaña, hasta la cama
Y me hace sentir, el rio del lama
Que habita dentro, de mi escama…
Verano de calores tormentosas
Sol que penetra, en las mucosas
Virus a vial que torturas, mil prosas
Velo de muerte, bacterias intravenosas…
¿Por dónde andas antídoto, purificado?
De científicos, que dan la vida y su legado
Hacer que este virus ya sea, solo pasado
Y el mundo encauzara su rito, más sagrado…
Empecé este testo buscando una salida
Al laberinto del mundo y de mi vida
Y por el camino, encontré la fe perdida
Gracia Dios mío, por acercarme á la medida…
Pero aun así, no veo ninguna salida
Al duro dolor, que al universo invalida,
Solo en la fe, esta la respuesta y su medida
Por eso rezo Señor, por la paz concebida.
¡Todos tenemos las respuestas, si vencemos al miedo que nos dan las guerras, de la vida y su dolor lleno, de ira!
¡Orar es el misterio, que “Dios” en su legado nos dejo, tras la lección de la muerte, de su mismo hijo “Jesucristo” redentor!
Modesto Ruiz Martínez / viernes, 11 de septiembre de 2009