Hoy me di cuenta que tú siempre has estado en mi caminar
Has guardado mis pasos de la maldad,
Me has llevado a triunfar
Y cuando he caído y me he lastimado
Tú me has levantado y me has curado.
Te agradezco mi Dios por librarme de los brazos de la muerte,
Por protegerme de las perturbaciones del fracaso,
Por perdonarme cada vez que te fallo,
Por sanar mi alma de todo dolor debido a la traición.
Hoy estoy preparado para morir,
Pues estoy seguro que si mi alma se eleva al cielo en eterna paz y alegría,
Tú me estarás esperando para recibirme con los brazos abiertos,
Estarás atento a mi llegada para celebrar con bombos y platillos, otra alma salvada.
Te agradezco mi Dios por todo lo que me has dado,
Por poner en mi boca las palabras para expresar el amor,
Por quitar de mi corazón todo el odio y el rencor,
Por abrirme los ojos y hacerme entender que debo disfrutar cada amanecer,
Por deshacer de mi pensamiento todo deseo oscuro y perverso de quitarme la vida porque no la merezco.
Una alabanza al cielo elevaré
La más entregada adoración cantaré
Agradeciéndole a Dios por sus misericordias
Porque todos los días curas esta alma rota,
Este corazón cegado por un oscuro sentimiento
De maldad o quizás triste a causa de la soledad...
Te agradezco por darme las palabras para expresarlas en forma de poesía...
Derechos reservados: Iván Velandia