Amigos, somos amigos. Nuestra amistad, nuestro futuro. ¿Cómo puedo ser tu amigo? Si por ti entrego mi vida, regalo mis sueños, dejo a un lado todas mis esperanzas porque la más valiosa eres tú. ¡Amiga! ¿Porque tuvimos que ser así? Si por ti haría lo mas loco del mundo, saco de un baúl de recuerdos los mejores momentos de mi vida, y en ellos estarías como la luz, como la flor, como la primavera.
No sabes lo tanto que duele saber que eres mi amiga y que será así por siempre, aunque la luna baje y me regale el destello de su alegría, y el mar envíe toda su tranquilidad hacia la fuente de tu sonrisa, seguiremos siendo amigos.
La distancia de nuestros mundos crea abismos en mi pecho y te amo con todo el corazón, pues tus palabras fueron tan claras en mí, tus caricias me elevaron al cielo y esos ojos, la forma en que me mirabas, cada palpitar de tu corazón; fueron piezas claves que sembraron en mi la ilusión de ser mas que solo amigos.
Las noches y los días, son tan complejos cuando no te veo; pero saber que te quiero tanto y que mi amor por ti crece día a día aunque para ti solo sean ideas vanas y te sientas incomoda hablando del tema. Pues te amo, eso es todo, no hay otra palabra, no hay que adornarla con más adjetivos, tan solo saber que ese amor nació por ti, crea la perfección en toda la expresión.
Cuando leas esto, te alejaras de mí, pensaras que soy un egoísta y que no merezco volver a verte. Quizás tengas razón, por elegir la felicidad ante la amistad, por creer firmemente que no importa el sol ni la vida si tu no estas a mi lado, por que sin ti, soy solo un hombre que elevo sus palabras al cielo y que nadie las leerá esperando que ese ángel llamada amiga las guarde en su pecho.