VIEJO TROVADOR

HOY ME DISFRACÉ DE OLVIDO

Hoy que yo me disfracé del olvido

me encontré desenhebrando el camino,

porque un néctar espía y asesino

fue tu flecha, en manos de Cupido.

 

Me vestí en este día de distancias

me alejé de tus sendas romanceras,

porque fueron tus plácidas aceras

que me ataron el alma a tus fragancias.

 

Y viví entre el olvido y las ganancias

pues sembré desvaríos, pensamientos,

que trajeron la vida con sus ansias

 

sumergiendo las nubes y los vientos,

pues sentí los sabores y elegancias

manantiales del alma y sentimientos.