Si me suicido la ilusión..
¿A qué entrañas de la esperanza le importa?.
Matar esta voz fortaleza..
..abriéndome las venas del sentimiento.
Para inundar con su desangrado silencio absoluto..
..la negra tinta de la falsa belleza.
Que me invento cada día del poema..
..entrelazándome a su piel de aliento..
..para que tengan donde sostenerse los huesos rotos del corazón.
El mayor acto será de Amor..
..liberar a los afectos de este lastre enfermo de condena.
En constante peso de inquietud..
..ya de por sí muerto de pena.
Consumido de agonía..
.. por nunca poder participar del remo de lo cotidiano..
..y ser siempre testigo de su embarcación lejanía .
Hu-yendo a la errante deriva de la multitud.
Todo el tiempo la vieja huraña me oprime el pecho con su guadaña..
..hurgando desánimos con su afilado mensaje definitivo de dolor.
Me echa su aliento de recordatorio podrido..
..y que me deje caer en sus brazos del olvido.
Su boca de infierno me asegura..
..que es la mejor forma..
De acabar de golpe y sombra..
..con esta tortura.
Tengo la garganta llena de piedras..
..que me hunden hasta el fondo mudo.
¡Dime Cielo!..
-Tú que me anocheces latente consciencia..
..toda vez que tu oscuridad me nombra-
¿Cuántos faros de apoyo necesito..
..para curar con su luz.?.
..este..
..Naufragio de consuelo.