(esperar 15 segundos de la música para leer el poema)
En un segundo se detuvo todo el mundo,
el tiempo se volvió eterno entre tus brazos,
la noche bajó las estrellas para hacerte caso,
mi voz, humana como la muerte, pudo florecer;
viví en el espacio de tu tiempo algo tan profundo,
sufrí tanta envidia de la soledad por estar a tu lado,
enterré bajo escombros la miseria triste de lo pasado,
el cielo se esmeraba para que se demorara el amanecer;
tus labios desnudaron en el alma besos de un amor puro,
soñé la felicidad como promesa hecha realidad de tu mano.
En tan solo un segundo, devaneo de caricias, salmo de ambos,
sentí que mi vida, a pesar de sus tantos azotes, volvería a nacer.
Vito Angeli