Un pozo de seres en absoluto sinsabor,
Padeciendo pesares, intenso tedio,
En melancolía sempiterna, dolor abrasador
Y sufriendo perennes en lastimero asedio.
No es vida, sino eterna y pragmática sanción,
Esto ser daño, existencia fútil,
Todo queda en espasmódica acción
Y se corroe en el patetismo de lo inútil.
Constante vocerío transmitido por millares;
Penas, dolores, aflicciones y agobiares…
¡Cementerio inmenso del horrido colectivo,
Desciende ahora a un averno destructivo!