Juan Carlos Luna Núñez

La tarea de Dios

Risas, caricias y besos; se quiso llenar la noche.

Cuando ardíamos juntitos, camino al

cielo, entre alas blancas. Pero llegó el frío

de palabras ajenas que has querido atesorar y el dolor

de saber que alguien mas te llama “mi niña”.

 

Amor es complicado; entre sollozos profundos

no entendía porqué te amaba así. He aquí la

explicación absurda de los poetas cristianos:

amor todo lo perdona y la culpa fue del diablo.

 

A la hora de mi muerte, cuán difícil será

el ensamble de mi ser. Valla tarea la de

Dios: encontrar los mil pedazos de alma

en los mil besos que te di.