Trovador de Sueños ...y realidades.

Compañera de Viajes Perdidos

No es que me resigne a la más alta

excusa que otorgan las ciudades abandonadas

al paso lento de navegantes que regresan

a ellas sin códices y con falsas

cartas de marear.

Recurro a la sangre de las últimas

hojas cargadas de sueños,

el único destino, tu insaciable deseo rezagado

y rey de insensible comarca.

Cierro los ojos dejándome amar

con prisa de anguila al desnudarse en lontananza.

El mar oculta mis páginas nocturnas

su escritura mas hirsuta que aterida,

el apostolado ángel de pleamar

dando propiedad a mi otro viajero

bienaventurado

en iluso litoral.

 

Me dan miedo tus pequeños senos,

anónimos y purísimos, encarnados vendavales,

cántaros invertidos, la mica en que terminan

tus dedos.

La pasión delata fuerza de mástil

enmohecido a la intemperie de más de un continente,

al noble animal de profunda agua

que late en tus manos.

Proa hacia nuevos horizontes

en olvido de la desidia,

isla desierta, sin vestigio

de raza alguna.

Cuanto frescor encierra tu presencia

soñadora y evocadora para un solitario

lobo de mar en fulgor de extrañas

tierras ocultas,

donde no existe mas razón de vida

que tu.

 

Reservados todos los derechos de autor:

Carlos Dos Santos Daniel