mientras todo parece perdido, alzas tus ojos al cielo y te resignas a perder todo lo logrado, poniendo tus pies descalzos sobre la alfombra y los gritos que lanzas al aire resuenan como fuertes truenos en esas cuatro paredes mientras el ultimo susurro te avienta de rodillas al piso, derramando lagrimas recordando que tras una llamada se escondía el dolor que causa ahora tu alma la condena de la noche a llegado a la luz del día lanzando una pesadilla que cambia tu parecer y decides hacer lo perfecto y reparar todo lo perdido que un sueño te pone en duda de lo que as fallado...