Te amo sin medidas,
en silencio, a escondidas,
de día y de noche,
entre lágrimas y
risas,
en un día soleado
o con tormenta,
con o sin la sugestionante
luna,
sin importar la distancia.
Con o sin razón,
soy peregrino de tu
alma,
siguiendo tus huellas
aún a costa de
mi existencia,
eres mi norte y
mi sur,
eres mi domingo
de fiesta,
eres mi lunes de
trabajo,
eres mi oasis
en un aciago día,
eres mi desierto
de fantasía y de
héroes,
eres mi caballero de
reluciente armadura,
eres mi mar de
esperanza,
eres mi pasión
de vida,
eres mi desayuno
y mi cena romántica.
Entre tantas razones,
ando en la búsqueda de
la fórmula para amarte,
hoy y mañana,
sin medir el tiempo,
sin medir nada en
absoluto
y de forma eterna.
Reservados todos los derechos de autor:
Carlos Dos Santos Daniel