Tu caminar lento
Sin prisas ni abismos
Sin adelantos ni retrasos
Sin preocupaciones ni juegos
Tus ojos son como un lago
Cristalino y atiborrado
Sin fallos ni envidias
Sin ganas y lúgubres
Tierna como un churumbel
Sólida como el acero
Firme como un raso
Y sincera como un ebrio
¿Cuándo regresaras?
¿Cuándo te marcharas?
¿Cuándo te quedaras?
Tus manos
Tu risa
Tu piel
Tu cabello
No te puedo tocar
No te puedo oler
No te puedo escuchar
Ni besar
Solo te puedo soñar
Y recordar, mi querida musa