Salí de tu vida, de tu cuerpo, de tu ser.
Ya Salí de tu ahogo, de amarte por siempre
para envejecer juntos, hasta la muerte.
Salí de entre las rocas, de tu ausencia,
y ausente me pierdo sin tu presencia.
De afuera miro y no comprendo,
me callo, me resigno a perderte,
esta vez... para siempre,
para no lastimarme,
para salir de tu mente.
Salí de tu vida, para entrar en mi muerte
Salí de tu imagen, para no verte.
Salí de tus ruidos, que ensordecen,
Salí del camino para perderme,
mendigo solo buscando razón
Salí del camino de mi corazón