"Pasó el tiempo y envejecimos mi cielo/ y se cubre de canas el paisaje./ Hoy ya no eres como una yegua en celo/ ni yo un potro salvaje".
Sí olvidas y te olvidan, deja de ser lo que era,
es como si lo que pasó, nunca hubiera pasado,
no se borra una página, es una historia entera
que una vez se escribió y ahora se ha borrado.
Es como si al cielo en su inmensidad infinita
dejara de importarle su más brillante estrella,
como una flor que en tu jardín yace marchita
olvidando por completo que una vez fue bella.
Como si el tiempo pasara igual de indiferente
borrando huellas antes imborrables sin querer,
ver en el futuro la anulación total del presente
y notar en el presente cómo desaparece el ayer.
Es un escenario con actores que te hacían reír
con muchas personas que viendo la obra reían,
aplaudiendo a rabiar en el teatro pero al salir,
ya ni se acordaban algunos por qué aplaudían.
Sí olvidas y te olvidan, aunque no lo creemos,
porque a veces inolvidables nos consideramos,
el aplauso si ganamos o el llanto si perdemos,
la magia que perdió aquello que tanto cuidamos.
Todo se va borrando lento en nuestra memoria,
tanto que pensamos, tantas cosas que sentimos
y algún día llegamos a ignorar alguna historia
por ya no recordar que un buen día la vivimos.
Es como si el sol se olvidara algún día de brillar
y ya no supiera que en un amanecer él debe salir.
Que la luna llena a un poeta no pudiera inspirar
porque él ha olvidado las cosas que solía escribir.
Sí olvidas y te olvidan. Amnesia que un día vendrá
a ponerle un velo a muchas de tus remembranzas
y en tu vida ya ni la huella más genuina existirá
de la época en que vivías con muchas esperanzas.
No es simple pesimismo ni algo que invento yo,
conocimiento que tengo ahora y mañana ya no sé.
Es el adiós en el tiempo de alguien que me olvidó,
amor que juré nunca olvidar y que un día olvidaré.