Se va extendiendo la brisa
con colores de esperanza
y voy abriendo a la vida
las puertas de mi añoranza.
Yo sueño con golondrinas,
que traigan la primavera
por las riberas floridas
del río de mis poemas.
Y se me achican los días
y las noches se hacen largas,
sabiendo que tu sonrisa
dormirá en mi misma almohada.
Y se me rompen las horas
y segmentan en minutos…
En tu mirada se asoman
los deseos más profundos,
pregonando que la aurora
brillará en mi cuarto oscuro.
La aurora será muy blanca,
como al alba son los sueños,
que van creciendo en el alma
con ilusión… con empeño.
Sueños dormidos, que afloran
entre sábanas ocultos…
son los mismos que a deshora
me hacen vivir otro mundo.
¡Ven a mí, que ya la brisa
se está callando en la tarde!
¡Ven a mí, con tu sonrisa…
que sólo quiero soñarte!