BACH

Desierto de LuciƩrnagas.



"Pues lo que tu boca cruel
             Esparce en el aire,
Monstruo asesino, es mi cerebro,
             ¡Mi sangre y mi carne!"

 

Charles Baudelaire.






-Estaciones muertas-
"Coplas,
modulando,
entre lenguas,
entre dientes
compaginando" 

"Páginas 
fingiendo
deseo,
frenar relojes,
burda razón
de atarte 
en esta partitura" 
-Muerta la partición-

Y, 
de, 
donde 
no las 
hay.

Boca asonante
mordiendo el oído,
tumba en los sentidos.

Acobardada,
traumada,
asentada,
tartamuda.

Tu lengua
otra vez
oprimiendo
la sazón
de violarte
otra vez,
letra, sonido virgen,
una y otra vez,
acoplarte al deseo
de la inspiración,
robándote del cielo.

-Brillas-viviendo-
"Sonríes 
en dedos,
achurando
el complot
de placer
infierno
en sonidos
esperando
el silencio"

"Sentencio
la sentencia
de esperarte
y no recuerdo,
antes de violarte
otra vez en un sueño"
-Mueres brillando-

/Desierto de Luciérnagas/
-Atasco en la retina-

Ojos
masturban
la razón,
sobre
la inconsciencia
de morder
un poco 
más del recuerdo,
pulcra 
forma
de 
olvidar
el dibujo
de tu pecho.

Pulcra forma
de no pintarte
en una hoja
avecindada
de notas
y dedos torpes
al no saber violarte.

-Un "Do" sostenido-

/Un Adagio estrechado en tu cuerpo/

Quebrado están mis dedos,
quebrados esta mi corazón yerto.



¡QUEBRADO!


 





¡VIVIR ES MORIR!

La guerra lo dice en la letra invisible de su contrato de paz.