Propongo escribirte
poesía en los labios,
con rimas perfectas
de suave estupor.
Propongo perderme
en tus cabellos lacios
y recitar en tu cuello
un poema de amor.
Propongo cubrirte
con besos ardientes,
absorber tu calor
y tus ganas de amar.
Propongo también
escribirte un poema
que diga en sus letras
lo que es suspirar.
Propongo escribirte
el deseo más puro
en tu blanca decencia
de divina pasión.
Propongo dormirme
en tus sueños más dulces
y entonar tus mañanas
como siendo canción.
Te propongo, quizá,
discutir tus caprichos
los que serán míos
si logras persuadir.
Propongo también
acompañarte en aquellos
los duros momentos
y sacarte de allí.
También te propongo
luchar por tus besos,
enfrentar el peligro
sin miedo a morir.
Propongo llevarte
a conocer mi destino
y al final del camino
morir junto a ti.
Te propongo,
enfrentarme a la muerte
para mirarle de frente
si te aparta de mí.
Te propongo finalmente
contarle al mundo
en mi último segundo
nuestra historia sin fin.
J.N.Q.