A CUALQUIERA DE VOSOTROS AMIGOS MIOS
Deja el reloj afanar su ciclo del tiempo
Deja la madurez alcanzar su justo punto
Deja la esperanza encontrar su perdido olimpo
Deja el valle lucir su verdadero encanto
Deja las flores llenar tu árido campo
Deja el otoño llevar tus errores con el viento
Deja la vida cantar su propio canto.
Sea impasible con los cambios del momento
Sea generoso para cubrir tu defecto
Sea compasivo con el pobre en llanto
Sea justo en compartir tu afecto
Sea sordo con los que avalan tu talento
Sea cuidadoso en revelar tu secreto
Sea temeroso con el herido casi muerto
¡Eres Humano, nada más que un humano!
¡Nadie te ha pedido ser un santo!