Llegando la noche no deseo cerrar mis ojos
El despertar me vuelve loco al saber que tú no estas
Con mis ojos recorro la habitación
Pensando que pronto vas a llegar
Como el sol que por la mañana me suele saludar
Traspasando sus rallos solares por el ventanal
Imagino tu rostro como solía brillar
Al acercarte al ventanuco para ver las aves trinar
Con tu larga cabellera el viento la hacia flamear
Bellas mariposas volaban en el lugar
Era como una tela pintada por picazo
Mis ojos jamás se cansaron de mirarte
Cuando dabas pazos de danzas a mi lado
Con gran ternura en mi hombro te apoyabas
Susurrando en mi oído
La canción que nos enamoramos
No les importo la gente ni lo que teníamos al lado
Para besarnos apasionado
Cuando recorro los lugares donde caminamos
Miro los arboles pienso que al caer sus hojas están llorando
En el otoño paseábamos tomado de la mano
Hoy solo paso, el sonido de las hojas me acompaña
Con mi rostro tapado que no seden cuenta que estoy
lagrimeando
Sentado en la pileta del agua
Ilusiones formamos no completamos
Hoy camino con el mismo paso a paso
Lentamente siguiéndote en tu último viaje
Los sollozos de los que me acompañaron
Solo era un coro de ángeles que te decíamos adiós
Cundo te tomamos de un costado de tu útil traje
Se me parte mi corazón llevándote
La mitad que se me desgarro
Chile.
Antofagasta, 31 d3 enero 2012
Autor Eco del Alma (Derechos reservados)