carminha nieves

MI JARDIN Y MI PATIO

 

Tuve un jardín, yo era una mariposa, volaba besaba las flores, alegre infantil era mí vida de niña.

Con el pasar del tiempo, mí jardín empezó a quedar sin flores, dejé de poder volar y de besarlas.

Me fui a un patio de hormigón, color ceniza, donde no tenía nada, tenía el frio bajo mis pies, ya no tenía la tierra mojada y fresca, que tanto me gustaba pisar.

En ese patio, de todo hice para me sentir viva, con alas de mariposa, como he vivido y conseguido no sé. Enferma, por mucho tiempo, con la vida peligrando, ¡tan joven era! Lo ultrapasé por milagro, después me ha entrado unas ganas de vivir ¡tan grande! Normal he visto la muerte muy cerca y no lo pude hacer. He continuado en el patio gris, tuve el adulzan te de mí hija, pero mismo ella creció y la é dejado vivir su vida, de nuevo sola he quedado.

Por estas cosas y muchas más escribo pareciendo triste, ¡equivoco! Soy alegre, soy dulce, el fuego del dragón del sufrimiento, no me ha quemado, al revés, me ha dado más fuerza, más deseo de ser feliz, en momentos como los que tengo vivido últimamente, pagan todo lo que no viví encarcelada en el patio gris.

Hoy tengo mí jardín y me siento mariposa, deseo que lo tenga por mucho tiempo, muchas veces tiene más valor un minuto de felicidad que años de dolor.

A quien me está dando esta felicidad, mi gratitud es inmensa, quiero poder hacer lo mismo por ellos.

Y para ti mí amigo tan especial mí abrazo de cariño con la esperanza que nadie nos separe.

Carminha Nieves