Federico Mendo Sánchez

ELEGÍA VII

Triste vivo siempre, desde que te fuiste

triste son mis horas, cuando tú no estás,

vivo en el vacío que tu ausencia viste

con tan negras simas que me ahondan más.

 

Mis ojos te buscan en cuanto pusiste

mis labios murmuran coplas de pasión

pero es vano todo porque ya no existe

la lámpara ardiente de tu corazón.

 

Vivo siempre triste sufriendo en silencio

el gran abandono que me dio tu amor

que no me quisiste, ahora evidencio

y que ya no te importa, ya mi hondo dolor.

 

Triste son mis idas, sin tu compañía,

nada tiene gracia porque ya no estas

sola por amiga a la melancolía

tengo noche y día porque no vendrás