ADOLESCENCIA
Magia de cristales pintados de blanco
Y detrás el Edén
Inesperada fascinación de los años de oro,
con el brillo de una piedra preciosa
Noches de atrevidas lunas, que juntas cantaron
un himno al tiempo, montado en brioso corcel
Un rostro de porcelana reflejado en espejos de tardes gloriosas
Ensueño guardado en oculto sagrario
Inamovible para los vientos,
Sin espanto de tormentas
Sin huellas, solo el vuelo alocado de la primera vez
Y los días serán custodia de la memoria
Sin invasión
Sin alucinaciones
Con el semblante del amado como estandarte