A veces cuando no escribo vuelan las palabras, vuelan como una tormenta de aires de anilina a ti, vuelan como las gaviotas y sus aferro a tierra firme, como las golondrinas y sus pasos de continentes diminutos. A veces cuando no escribo es cuando más lo hago, mis ojos trazan A en los cielos que desde arriba te ven, la S y sus cauces de zic zac en los ríos que no perecen, las M en las altas montañas con canas, las O en los caminos que me devuelven siempre a ti. Algunas R en los rostros que quedan detrás, las I en las ideas que pienso y nunca hago. Escribo, cuando no lo hago, como un soñador despierto. Hay P en las veces que te pienso, X en las cosas que hice y me alejaron de ti. B cuando un beso tuyo quiero, F cuando estas junto a mí. A veces cuando no escribo vuelan las palabras y es cuando más lo hago.
LRL
2-2-2012