Los sufrimientos del transporte colectivo
dejaron en mí, huella certera,
que sin duda me sirvieron de motivo
para querer vivir de otra manera.
Fue así como el estudio y el trabajo
Llevado con empeño y dedicación
me dieron la dicha de comprarme un carro
y poder decirle, a los buses adiós.
Se acabaron las horas de deleite
que pasaba en horas de peatón
ahora pienso en cambiar aceite
y comprar gasolina en la estación.
Pensé que con ese cambio radical
de tener vehículo propio traería paz
y hoy comprendo que es otro mal
el que ahora me aturde más y más.
Al vehículo se le pinchó una llanta
y tiene fallas de carburación,
el bolsillo de verdad que ya no aguanta
los altos gastos de reparación.
Si reparas asuntos de mecánica
para tener un poco de tranquilidad
sigue al otro día la problemática;
ahora por problemas de electricidad.
Comienzas entonces la era del “or”
para poder convertirte en mecánico audaz:
El radiador, el alternador, el carburador
el condensador, el compresor y otros más.
EL pago de trimestre vehicular
y el trámite para licencia de conducir,
serán ahora el diario trajinar
del que no podemos ni siquiera huir.
Y eso sin contar los accidentes
de sufrir que un conductor descuidado,
casi te saca tus preciados dientes
porque repentinamente te ha chocado.
O si tú en cierta ocasión
por contestar el teléfono celular
tuviste sin querer una colisión
y tener que los gastos sufragar.
Y eso sin contar las amistades
de esas que salen a montón
que tienen como normas elementales
que todos los días le des el “aventón”
Se acabaron aquellos tiempos serenos
de no andar abrigando el horror
sin el susto de que fallaron los frenos
o si te robaron el espejo retrovisor.
Tener que andar pasando apuros
para comprar combustible y batería
Y gastar los ahorros en pagos al Seguro
que se van incrementando cada día.
Hoy he llegado a la conclusión
al verme envuelto en tantos males
que aquel problema era mejor
a pesar de tantas calamidades.
No sé si vivir a plenitud,
es andar montado en colectivos…
Mañana mismo me iré en autobús
y le vendo mi vehículo al vecino.