No quiero molestar a tu cansada mente ni a tu agrietado corazón. Ya he visto congelados páramos del tiempo cuando sólo tu tierno ser te sostenía. Quiero golpear con cada letra los rostros tétricos de aquellos que te abofetearon por dentro, cuando necesitabas caricias y abrazos. Tiempos de duros inviernos, de pasos inseguros, de ásperas soledades. Quizás no te convenza ni te agrade mi manera de ver las cosas, ya que las miro diferente, pero tu dolor es mío también desde que te besé.
No pienso negociar tu felicidad con nadie. Aún hay gente que juega con lo injusta que ha sido la vida con uno, careciendo de eso que nos hace humanos, el amor por el otro. Quiero que cada obstáculo te haga más fuerte, y que cada tropiezo te enseñe a caminar mejor. Tu alma esta bañada en fuego y arde como las alas inmortales de un Fénix. Recuerda siempre que rendirse no es una opción, y mucho menos retroceder. Haz de tu realidad, la envidia de tu pasado y la admiracion para tu futuro.
Santii!♥