La luna empalidece tu rostro,
la gris arena juega con la brisa,
las olas hacen una fiesta con su música
y danzan por tu gloriosa sonrisa
Ay mi bien, que dulce es tenerte
que bueno es nuestro encuentro
sólo con mirar tus tiernos ojos
de amor me derrito y muero
Tu silueta es mi delirio
tus besos mi ambrosía
y tus manos la locura
que me despoja de toda cordura
Corazón, que insensato eres!
como te regalas sin pedir nada a cambio
te dejas hechizar por su mirada
que en la noche te ha flechado
Palpitas locamente
te embriagas en deseo
mientras la brisa te roba
de su boca sus dulces besos
Pídele, vamos, atrévete
un cándido roce en los labios
que con eso es suficiente
para tener el cielo entre las manos