Tan enigmática como problemática,
siempre pensativa más nunca deliverativa,
todo un embrollo, un caos analizador.
Siempre mirando más nunca observada.
A cada paso mil ideas...
dos mil sueños por realizar
y tres mil cosas por superar.
Siempre soñadora nunca idealizada.
Simple pero enamorada,
por lo tanto aún más enigmática,
siempre egoísta y compartida,
aunque responsable es angustiante.
Siempre irritable pero emocionante.
Con mil sueños y anhelos
pero sin algo fijo y definido,
a la deriva, rota e insípida.
Sin vida pero con respiros