Desasiéndome en tu boca solo contemplo tu rostro cetrino, tus labios negándome , negándose, mi felicidad en una balanza puesta , lo que me separaba de ti era 70.000 pesos de felicidad, la negación era no solo la negación de una acción era la certeza de una realidad, ahora comprendo la prueba de Jesús con Judas, no fue el dolor de una traición, fue poner un amor en duda y confirmar que no se estaba lo suficientemente cerca de sentir, para que Judas y tu hubiesen tomado una decisión que al final trae una enorme distancia que incluso tocar el sol seria mas cercano a la realidad que crear un acercamiento entre tu yo entre Jesús y su amado Iscariote.
Sabes cuando mi alma se fungió de ti, mi ser se volcó hacia el abismo de la incertidumbre, por ti había un torrente tan fuerte que sentí latir el universo dentro de mi, por eso me enamore, después entregue mis armas, ignore las voces provenientes de tu presente que me gritaban que me alejara, solo adivinaban mis cadáveres que contigo renacería la vida en mi corazón muerto, fusilado por los ayeres de mi existencia, una vez te dije que había nacido cuando te ame, ahora comprendo que ese día morí mas que hoy, que en verdad vuelvo a resucitar.
Jesús el Nazareno te hablo a ti, empuño mi pluma con tu don, hago una oración de suplica para ti, tu que viste pasar tu vida en la agonía de la cruz, tu que perdonaste a quien te entrego en las manos del hombre, desprende mi corazón de su cruz, abrígame, embriágame y haz que mis quejidos no se escuchen en el Gólgota de su nombre, Amigo, Creador desata una ánfora en mi alma que contenga el vino del olvido, arráncame, constrúyeme….. y déjalo a el con su ORFEON mudo, para que intente tantas melodías insonoras, como días alegres me dio en mi eterna muerte junto a el.