Nuestras almas desnudas,
todo en un encuentro ocasional,
no sabia que dentro de mi te sabia,
de hace tanto tiempo atrás...
rosaba tus manos,
traspasando el vidrio de cristal,
mirandote los ojos,
sonreíamos igual...
y mi alma te reconoció tan sublime,
tu luz y tu bondad,
y nuestros corazones ya latían,
al mismo ritmo musical,
y sentí nacer de nuevo,
y una semilla floreció en mi corazón,
lo pesado se hizo ligero,
he despertado a un nuevo amor,,
una parte de ti dentro de mi,
una parte de mi dentro de ti,
somos una sola alma,
repartida entre dos...