Camine en la noche mientras el mundo dormia sus amores, sus intrigas y sus pasiones olvidadas. Vi las calles desoladas y senti el frio caminar en mis entrañas quemando mis anhelos y envolviendome en un mar de tristezas. Segui caminando sin mirar atras buscando las respuestas pero siempre estaba de presente una nube gris que revoleteaba en mis pensamientos impidiéndome ver la luz que yo que queria ver en mi interior. Sn darme cuenta, ahora estaba sentado al frente de la carrilera del tren midiendo los ruidos de sus estruendosas trompetas y vi como la gente se arremolinaba al rededor de el con pañuelos blancos y flores blancas que se desperdigaban en su interior. M acerque un poco y pude ver una cara inmensa llamada felicidad pintada con todos los nombres de los habitantes de este pueblo en letras grandes y fue cuando comprendi que las tristezas se vuelven mudas en el frio de mi pueblo y las alegrías llegan en los vagones del tren a media noche.