Al espíritu de mi Musa
¡No, quiero tu cuerpo!,
tus besos o tu piel.
Quiero tu lánguida mirada,
para perderme en rayo de su luz,
para olvidar el día,
para soñar.
¡Quiero tu sonrisa!
para perderme
en el viento de tu aliento,
para viajar por el universo.
¡Quiero, tu pensamiento!
como se ama el aire
que se respira,
el alimento que se consume.
¡Quiero tu alma!
para expresar lo que siento.
Nilo