Cuatro días, sin abrir el ordenador, sin razón alguna, solo, no quise.
Tenía mi cabeza llena de problemas por solucionar, así, acostada, he puesto todo ordenado, tomado decisiones, que no cambiaré.
Con consciencia y pesando los pros e encuentra, con realismo, sin dejar que lo emocional cortara el hilo de mi pensamiento, están tomadas mis líneas maestras, de lo que quiero y de lo que los otros desean.
De aquí para delante, no merece la pena, que nieguen los hechos, que disculpen lo que no pueden, que nieguen lo que mis ojos miraran y mis oídos oyeran, eso terminó.
Ahora con certidumbre, de que no puedo contar con amistad, ni comprensión, desconecto y vuelvo a ser yo en mi total.
Palabras fuera de la boca son piedras, que lastiman, cuando son dichas de mala fe, no tienen retorno. Convencida, de que tengo que arreglarme sola, así lo haré, no hay otro remedio. Aceptar y nada más.
Mañana, que no me culpen, que no digan mentiras, lo tengo todo gravado.
Por eso esta ausencia, del ordenador, me hacía falta, no escribir para desahogar, mis momentos dolorosos, de lo que observo.
No busco ni nunca busqué, complicaciones, otros lo hicieran, así siendo, cada uno es responsable por los actos que practican. Que quede claro, me empujaran, para las decisiones que he tomado.
No admito que duden de mi seriedad, de mi honestidad y del respecto que debo a mi misma como mujer con M grande.
La contradicción de mi ser, es que aun soy niña, hago las cosas, sin maldad, sin olvidar mis obligaciones, pero, ha llegado mi momento de vivir suelta, sin nudos, amar como puedo y debo a mi edad, me han dicho entre otras cosas, “que envejezca con dignidad” que respecte a mi familia. ¿Cómo? ¿Qué es esto? ¿Broma de malo gusto? Pienso que algo está mal, porque primero, me tienen que respectar, después, lo mínimo era ayudarme a ser feliz, tengo ese derecho, la amistad no es clavar espinos, si no evitar que me los pongan, si es que hay amistad.
Rebuscando en lo que escribo, buscan razones inexistentes, para me condenar. No lo consiguen, yo tengo alguien a quien quiero, que sabe que mi tiempo no es mucho, que tenemos que aprovechar todos los segundos, por él y por mí. Pueden andar de patas arriba, que no me doblan y mejor seria, pensar que pagaran más tarde lo que hacen hoy.
Dejarme en paz, no se quieran mesclar ni meter en medio de mi y de mi amigo, es muy fuerte lo que sentimos, en la verdad y confianza, a poco y poco, me están obligando a alejarme cada día un poco más de tanta falta de comprensión. Así lo quieren, así lo tendrán, por ahora, si continúan a perseguirme, peor para ellos, la paciencia tiene límites, entonces peor será, no para mí, pero para quien quiere mandar en quien no le es nada. Por mi parte, nunca habrá venganza, ¡ni pensar! Solo pena y tristeza de que no sepan soñar y vivir en paz.
Así, volando en mi nube blanca y suave, paso por entre todas las otras, cenizas o negras, sin preocuparme.
De una vez por todas, por favor déjenme en paz, busquen otra distracción, otro tema de conversación, ya no me lastiman, para nada, estoy feliz y así continuaré, con la ayuda de Dios.
Que puedan vivir felices, que hagan de cuenta que no existo. Solo para ayudar cuando lo necesiten, aquí estaré incondicionalmente, para hacerlo.
Bajé de mi monte, después de mucho pensar, así de aquí para delante, a vivir y andar por los prados floridos de mil colores, sin pisar las flores, de leve camino, junto a quien he elegido.
Oporto, 16 de Febrero de 2012
Carminha Nieves