Hoy he vuelto a mi puerto, después de muy largos años,
y lo he visto muy cambiado, recordando aquel ayer,
está el malecón sombrío muy mojado por los baños,
de las aguas que en la orilla lo acarician con placer.
Esas olas, esa arena y las tardes de colores,
¿qué pasó con la Ramada?, sólo está el Malecón,
el Casino Español atestiguó a mil amores,
Rumbaneys y los Pasteles, ya no están, qué decepción.
A este mar estoy unido pues mi alma es marinera,
las Ferrol e isla Blanca mi juventud vieron llegar,
San Pedrito guardó mi alma, mi plegaria es sincera,
fuiste tú Chimbote mío, el empuje en mi bregar.
Hoy son otras las gaviotas que surcando están tus playas,
y la lancha Moby Dick que hoy solamente es un recuerdo,
algún día ya lejano, dejó el puerto con sus mallas,
pescadores aun la esperan con plegarias cual acuerdo.
Ayer fuiste una playa muy colmada de palmeras,
hoy no son las mismas olas que golpean tus orillas,
y tu plaza 28 de julio tiene damas jaraneras,
mi Chimbote aun cambiado en ti veo maravillas.
Hoy encuentro otra luna en mi noche frente al mar,
mi nostalgia me ha llevado a gritar Gálvez querido,
mi escuelita la Minerva y el San Pedro, son el hogar,
donde hice mis estudios, en Chimbote ahora ido.
Otras aves van cruzando La Caleta en amorío,
y una lágrima temprana hoy se escapa de mis ojos,
ya no eres tú el puerto del ayer, Chimbote mío,
hoy tu playa está manchada y muy llena de despojos.
Ya no están los viejos cines ni teatros de mi infancia,
otros rubros ahora ocupan lo que hubo en el lugar,
el mal tiempo transcurrido y otros por la circunstancia,
no tuvieron más remedio que sus puertas ya cerrar.
Dónde está el Maracaná, donde me bañé de niño,
el Vivero Forestal, donde jugaba a discreción,
en Paul Harris declamaba con pasión y gran cariño,
a lo que hice en mi Colegio, yo le puse corazón.
Así llegan los recuerdos de aquellas primaveras,
el mercado y los trenes y aquel templo Matriz,
con la Sider y su acero y el furor de las pesqueras,
en el mundo fuiste el primero y también en el país.