Déjame besar tu tierno corazón
Quédate cariñoso, bondadoso y puro
Quédate como si fuera una excepción:
Bueno, justo, compasivo y digno de adoración
No te añades más, nada obscuro
Si quieres compréndeme y ser justo conmigo:
Déjame beber en la fuente de tu alma
Deja que broté en mi paladar su dulzura
Déjala virgen, inmaculada como la miel pura
No le añade nada más amargura
¿Si quieres verme como un esclavo en tu espejo?
Permítame alcanzarte , mirarte para encontrar mi propio reflejo
¡Tu eres yo, tu eres mi guía y mi consejo!
Y sin ti, estoy desesperado , no tengo otro cobijo
¿Y si aun tienes sed?
¿Y si un día pretendo a tu merced?
¡Beba de mí!
¡Sáciate de mis venas a tu antojo!