Somos como el invierno;
Tiernos y averiados
Como su frío hecho nieve,
Somos como el ocaso;
Cálidos y visuales
Como su agonía.
Somos como un recuerdo;
Efímeros y eternos a la vez,
Como el verso en poesía;
Tenues y reales.
Tan iguales
Como la vejez de un beso
Que es tan igual
Como nuestros labios,
Tan congruentes
Como el destino
Tan repentinos
Como un instante.
Somos como un gemido;
Vehementes y precisos,
Somos como un castigo;
Tan lacerantes y masoquistas.
Somos como una lágrima;
Suicidas y subjetivos,
Somos como la lluvia;
Tú en grata y yo en desbaratado.