EL último BESO:
Qué triste fue el último beso que nos dimos, pareciendo que los labios también lloraran, producto de las lágrimas que por nuestros rostros corrían a raudal, mientras abriendo los húmedos ojos, nos quedamos parados mirándonos fijamente, mordiéndonos los labios hasta casi producirnos, daño, sin pronunciar palabra alguna, solo viendo, como hilos de profundo sentimientos, continuaban recorriéndonos nuestros rostros, penosamente...,
Qué triste fue el último beso que nos dimos, recordando, momentos sublimes que fueron detalles muy queridos de los dos, acrecentándome más el sufrir que ya padecía dentro de la mente, sabiendo que después de esta entrega sin condiciones, no abría otra oportunidad sincera, para poder vivir sueños de primavera, donde el frio invierno de soledad, ya había cobrado por falta de tiempo y espacio de amarnos en los brazos, la pasión que debería haber latente en la sangre a la espera...,
Qué triste fue el último beso que nos dimos, saboreando lentamente ese amargo dolor de ausencia que sentimos a flor de piel, presintiendo el final de la historia de amor, que mucho no se hiso esperar, cuando tus suaves manos de mis manos se fueron separando y dándome la espalda, te fuiste caminando, alejando del lugar, dejando escapar un lamento que retumbó en la tranquilidad de la noche, sin voltear siquiera un instante, para decirme, adiós.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 23022012 10:00 PM.