Guillermo Santiago 956

LA DISTANCIA

Te añoro mas que a nada, la distancia no es mucha pero si la suficiente ya que llevamos casi año y medio sin vernos. Cómo se yo, si cuando me vuelvas a ver vamos a estar igual, espero que sí, pero… Temo, temo por tus pensamientos, lo siento, pero he de decírtelo, si, temo por tus pensamientos más que por la distancia. Los pensamientos son algo más abstracto y subjetivo, la distancia no. Además, temo a dos bandas, una sería la opinión tuya sobre mis pensamientos hacia ti y la otra sería el temor de tus pensamientos hacía mí. Ojalá pudiera verte ahora mismo y comprobarlo ya. La espera, es decir, el tiempo, es peor que la distancia ya que tememos a la distancia por el tiempo que tardaremos en abordarla.

 

No te imaginas las ganas que tengo de demostrártelo, de volver a verte, para que no lo dudes más. Se que desconfías por cosas pasadas… y no te culpo, no quiero que me malinterpretes pero por eso mismo quiero demostrártelo. Quiero demostrarte que esto es real, tan real como nuestra existencia.

 

No hay ninguna fuerza que se interponga entre el amor de dos personas y me da rabia que tengas que leer esto en vez de poder escucharlo frente a frente, cara a cara, juntos, junto a mí; Mirándonos a los ojos, serios y pasivos por fuera pero tremendamente alegres por dentro por haber roto la distancia y la espera y estar en el mismo lugar juntos; tan juntos cómo la primera vez que nos conocimos y dormimos al lado, pero esta vez sabiendo todo el uno del otro.

 

No habrá más perfección que la que tú me des. Sólo busco el camino que haga que no me pierda en el olvido, porque quiero que algún día pase esto. Por eso, cada llamada perdida no es una simple perdida sino un “estoy pensando en ti y no quiero que me olvides”, cada mensaje es una declaración, cada privado un argumento a favor y ya las conversaciones son algo indescriptible. Ante todo recuerda lo que te dije hace tiempo: “Si dos claveles en el agua no se pueden separar, dos amigos que se quieren no se pueden olvidar”.  Y que “si mi dedo fuera pluma y mi corazón tintero, con la sangre de mis venas yo te escribiría TE QUIERO”.

 

                                                           Guillermo Santiago   19-Mar-11

 

(Añado un fragmento a este escrito ya que veo que no es del todo correcto). En realidad, si que es más importante el tiempo que la distancia, ya que, como he explicado antes, tememos la distancia por el tiempo que vamos a tardar en recorrerla, pero creo que hay una fuerza aun mayor, que ahora, después de unos meses de haber escrito lo anterior, me he dado cuenta; esa fuerza la denomino velocidad. Ya que el tiempo es relativo, sobretodo el tiempo sin verte a ti, por eso temo más a la velocidad con la que se me pase el tiempo hasta que te vuelva a ver, a oler, a mirar, a sentirte mas cerca de lo que ya te siento, ojalá se me pase rápido, ojalá, porque cada día sin verte es simplemente un día mas, seguro que el día en que te vea, será un día muy especial y no un simple día sin más. Que sepas que por mucha distancia que nos separe, por mucho tiempo que estemos sin vernos y por muy lento que se me pase; no me voy a olvidar de ti nunca, porque sería como olvidarme de una parte de mi mismo, ya que una parte de mi vida, no tiene absoluto sentido sin ti, perfecta, y créeme cuando te digo de todo corazón, que ahora late fuertemente en mi pecho, que te añoro, te hecho de menos, te quiero mas que a ninguna otra persona he querido, y lo mas importante, tu eres la única persona a la que le he dicho la preciosa y bella palabra “te amo” y espero que eso no cambie nunca, ya que si solo se puede amar a una persona en el mundo, yo, te elijo y siempre elegiré a ti.

 

                                                           Guillermo Santiago 28-nov-11