En este bello día
¡siento que te necesito!
que me falta tu presencia,
que sin ti nada es lo mismo.
A estas horas te recuerdo
con nostalgia en mis sentidos.
Mis ojos ven todas las huellas
que has dejado en el camino.
Te extraño tanto que quisiera
olvidarme de que existo.
Sólo en mí cabe tu esencia,
flor dorada del destino.
Volveré a verte de nuevo
cuando el tiempo sea preciso.
Estarás tan alegre...
porque te habré reconocido.
Te amaré con la ternura
que tu vida me ha ofrecido.
No habrá dolor en la distancia,
mientras yo viva, cariño mío.