MIRÁNDOTE a los OJOS:
Mirándote a los ojos, podría jurar que algo retienen tus labios mordidos y no hayas como revelarme, pero no temas mujer, comienza hablar cuando quieras, porque quizás para mañana, sea muy tarde ya, hasta para sentarnos y escucharte, haciéndole más daño al corazón...,
Mirándote a los ojos, leo lo que tu boca siempre ha callado, por no verte nunca descubierta, desnudando verdades, reflejo de tu pecaminosa alma, no queriendo notar mi recordada presencia, sentimental, frente a ti, pudiéndote hacer flaquear, tus emociones...,
Mirándote a los ojos, sé, que guardas un profundo secreto entre Tú y Yo, que es razón de distancia y olvido de todo lo vivido y sentido en la piel, durante tantos años, juntos, viendo crecer la flor del amor en nuestras propias manos, dándonos un beso, cada amanecer al despertar...,
Mirándote a los ojos, presiento estar viendo el sufrir de tu cuerpo desnudo, sobre una cama de impecables sábanas blancas, cabeza en almohada de igual color por confidente, humedecida, por entristecido dolor de ausencia, que no lo alivia recuerdos del ayer, ni menos otro amor...,
Mirándote a los ojos, apostaría que el sufrir en soledad, has comenzado a conocerlo, donde el mío termina, aprendido, por obra de vida, que decidiste llevar a cabo en silencio, abandonando principios fundamentales de existencia, por coexistir con una idea a tu manera en libertad.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 27022012 10:00 PM.