Lo nuestro ha venido dichas sumando
mientras resta cada desavenencia
también acuerdos va multiplicando
y dividiendo toda la incongruencia.
Amor con su matemática esencia
con una aritmética progresión
elevando al cuadrado la pasión
tenemos ecuación de dos variables
en cuyo resultado incuestionable
nos da número entero sin fracción.
El límite en que ambos ya nos amamos
se integra todo a la variable tiempo
derivando la equis en cada encuentro
producen logaritmo al abrazarnos
y la raíz cuadrada que buscamos
con esa ternura en potenciación
nos sumerge en una radicación
de esas matemáticas alegrías
con ángulos de tu geometría
que tienen ya sobrada precisión.
Líneas paralelas ya no existen
en este ejercicio entre tú y yo
porque un punto en la tabla nos unió
fusión hoy que todavía persiste…
Esa trazada gráfica que hiciste
junto a la mía juntas se precisan
y en el eje de las curvas abscisas
o tal vez en el de coordenadas
hay dos líneas que están abrazadas
donde todo el valor se maximiza.
Es el máximo común divisor
la función que dejamos sin efecto
porque hemos acordamos en secreto
mínimo común múltiplo mejor
y en ese afán de gran calculador
ejercitado entre tu amor y el mío
no hay tiempo que permita desvaríos
porque la progresión sigue constante
y así iremos juntos en adelante
porque no habrá ya, conjunto vacío.
*****