"Inspiración que un día viniste/ y tanto mi vida transformaste,/ porque fue muchísimo lo que me diste/ y nada lo que me quitaste".
A ver... hoy el poema debe ser alegre, ayer fue triste,
no encuentras aún la alegría ¿será que la escondiste?
Bueno, siéntate y espera a que te llegue inspiración.
Verás que en minutos no habrá letra que se te niegue,
pero recuerda que no habrá verso alguno que te llegue
si no mantienes abierta tu alma y muy vivo tu corazón.
Alguna idea te vendrá, sólo espera y no te impacientes,
ya tendrás el tiempo necesario para decir lo que sientes
y plasmarlo todo en el estilo que hoy más te provoque.
Es posible que más que en otras ocasiones ya te cueste,
si hay algún mal recuerdo que exista aún y te moleste
o alguna historia triste que tu alma de repente toque.
No tienes por qué preocuparte, igual podrás escribir,
vivir tú o lograr que otros al leerte lleguen a vivir
unas reales, intensas y ejemplarizantes experiencias.
Alguna letra salida de tu alma con seguridad contará
lo que sientes cuando la persona que amas cerca está
o cómo te castiga de vez en cuando con sus ausencias.
Ve buscando la imagen y ponle título ya a tu poema,
encuentra una frase tuya que hable del mismo tema
y escribe lo que se te ocurra ahora en la nota de autor.
Si estás algo triste ignora eso y exprésate con alegría,
sonríe como si hubiese sido muy bueno para ti este día
y no permitas que se note, si en tu alma hay un dolor.
Recuerda poner en azul las letras de tu frase arriba
y en negritas y en cursivas las del poema que escribas
y que te digan que satisfecho, que muy feliz pareces.
Total, si algo al final de lo que sientes en letras quedó,
no olvides ahora que sean algunos republicados o no,
no es nada sencillo mostrar lo que sientes 600 veces.