De pie frente al mar,
sé que mi soledad es
compartida por ti,
en cualquier lugar.
De pie frente al mar,
las angustias nos desbocan
el alma, por no estar el uno
al lado del otro.
De pie frente al mar,
nuestro inmenso amor
crece un poco todos los días.
De pie frente al mar,
al contemplar el infinito
azul del firmamento,
siento tu presencia
junto a mí.
De pie frente al mar,
escuchando el arrullo
de su olas,
percibo tus palabras
llenas de pasión.
De pie frente al mar,
cierro los ojos y
rozo con mis dedos,
la seda de tu piel.
De pie frente al mar,
continúo con los ojos cerrados y
aspiro el aroma de tu fragancia única.
De pie frente al mar,
sigo con los ojos cerrados,
y no imagino mi vida sin ti.
De pie frente al mar,
me doy cuenta de su inmensidad,
pero no es nada,
comparada con la de nuestro amor.
De pie frente al mar,
los murmullos de la vida
que encierra,
hace que mi corazón
con ritmo desenfrenado
te ansíe una vez más.
De pie frente al mar,
no me queda la menor duda,
hemos nacido el uno
como complemento del otro.
De pie frente al mar,
ya no somos dos almas,
somos solo una,
y hemos nacido para el amor
de pie frente al mar.
Reservados todos los derechos de autor:
Carlos Dos Santos Daniel