Olvidemos el tiempo,
si las horas que te tengo,
son suficientes para inspirarme,
y no hay minutero más exacto,
que la atracción que tengo de escribirte,
es como un imán que atrapa mi emoción,
y en burbujas delirantes,
brotan versos de mirarte.
Ya no importa el reloj,
si en mis días y en mis noches,
hago planes de pensarte,
te estacionas en mi mente,
y sin perder un solo instante,
vuelvo para encontrarte.
Ya no existen distancias,
porque te siento cerca de mí,
estas presente en mis letras,
te encuentras inmerso en mi poesía,
en cada espacio de mis palabras,
en la tildes y en las comas,
allí secretamente,
vive tu imagen sumergida,
que surge para iluminar la musa,
para encender de luz al corazón,
para brotar en el alma,
dulces melodías,
que sutilmente evocan sentimientos.
Colombiana.