Yo soy un hombre del campo
porque nací de la tierra,
me crié entre las espigas,
junto a las flores más bellas;
anduve por los barbechos,
páramos yermos, riberas
de ríos serpenteantes
que riegan la fértil vega,
donde las aves canoras
adornan la primavera.
El mirlo canta en la fronda
y la paloma zurea;
el crotorar en la torre
de la zancuda cigüeña,
se mezcla en el alboroto
del chirriar cuando planea
el vencejo, el estornino
y el gorrión en la azotea,
anunciando el nuevo día
de una vida placentera.
Acordes de paz y dicha
que en el silencio jalea
la tranquilidad del campo,
la bendición de la tierra,
donde todos los caminos
te marcan la mejor senda:
Sin lujos, sin ambiciones,
sólo el amor a la tierra.
Pues de la tierra he nacido,
yo quiero morir en ella.
Poemas de Camilo